Viviana, que le ha hecho ojitos a Carlos Sobera cuando ha entrado al restaurante, ha sido muy explícita a la hora de juzgar a su cita: no le gustan nada los hombres calvos. Tampoco le ha gustado su vestimenta: “Ha venido marcando los pezones…No sé… ponte ahí algo…como las vedettes”, nos ha dicho en petit comité. A pesar de todo, ha aceptado cenar con él y, dándose cuenta de que el físico no es lo más importante, la cita ha terminado MUY BIEN.
↧